Cassie Bright
caminaba apresurada por los pasillos del Altlended Norwest Christian College.
De no hacerlo, llegaría tarde a la clase de historia de la profesora Sprout.
-¡Cassie!-
Una voz cantarina hizo que frenara en seco.
-¿Qué querrá
ahora?- Pensó algo disgustada. No podía permitirse una tardanza en su legajo.
Nunca pesó
que Abby Digman volviera a hablarle después del domingo en el Sydney Festival.
Creyó, con toda seguridad, que al día siguiente en la escuela todo volvería a
la normalidad y ella seria nuevamente ignorada. Pero no era así. Abby caminaba
hacia ella con su característica sonrisa de dientes perfectamente blancos
dejando a sus dos amigas solas.
Cassie
contuvo una carcajada sarcástica. Las dos rubias, cuyo color de cabello
intentaba patéticamente imitar al de Abby, miraron a su amiga perplejas. Abby
Digman hablando con Cassie Bright, esto definitivamente era todo un
acontecimiento.
-Hola- Dijo
cuando estuvo lo suficientemente cerca para que Cassie la escuchara.
Ella le
respondió su saludo con un gento de la cabeza, un tanto nerviosa.
¿Justo en
este momento se le ocurría hablarle?
-Cassie
quería agradecerte… por lo que hiciste por mí ayer- Inicio la rubia la
conversación.
-No fue
nada - La chica de los grandes lentes intento esbozar una sonrisa como la de su
compañera, aunque sin tanto éxito.
Rápidamente
Abby se sumergió en una conversación frenética acerca de lo fantástica que
había sido la obra. Lo que exasperó un tanto a su interlocutora. Los minutos
corrían y ella no tenía tiempo para esto.
-Tengo que…
- Empezó a decir mientras se alejaba- Tengo que irme, lo siento-
-¡Nos vemos
en el almuerzo!- Le escucho decir a la rubia.
Asumió sin
duda alguna que sólo estaba siendo cortés. Después de todo, sin importar cuán
buenas fueran las intenciones de Abby,
su séquito jamás dejaría que ella se sentara en su mesa. Se tranquilizó a si
misma recordándose que de todas formas no tendría tiempo para ir a almorzar. Tenía
que ir a la biblioteca. Estaba sumida en sus pensamientos cuando sintió que
chocaba con alguien que, al parecer, estaba tan apurada como ella.
-Perdón- Se
disculpó acomodando sus anteojos con una mano, y evitando que sus libros cayeran con la otra.
-Está bien,
fue mi culpa estaba algo apurada - Contestó Scarlett, la chica con la que había
chocado – No te vi venir-
Su cabello
era de un negro azabache, lacio y largo hasta mitad de la espalda. Si se la
observaba del ángulo correcto se podía apreciar su peculiar corte, el costado
derecho de su cabeza estaba rapado, siguiendo la moda actual.
-No importa,
yo también estaba algo distraída-
Ambas
jóvenes se sonrieron y continuaron su camino, cada una por su lado.
…
La razón
por la que Scarlett estaba apurada era porque por fin había decidido hacerlo.
Llevaba fuertemente apretado en su mano una copia de su reseña del concierto de
The 1975, el que había presenciado junto
a Calum el día anterior. Estaba decidida. Iba a entregarle a Summer Aworth su
reseña y nada podría evitarlo.
Se paró
frente a la puerta donde rezaba ‘Editorial’
en letras negras y la golpeó energéticamente con el puño.
Summer
Aworth, la editora del periódico, abrió la puerta y le dedico a Scarlett una
sonrisa sorprendida.
-Hola, soy Scarlett Link- Dijo con voz temblorosa- quería
darte esto- Extendió su mano para entregarle el pendrive con la reseña escrita por ella misma. La rubia lo
tomó y lo examino.
-Es una
reseña del concierto de ayer, de The 1975 en el Sydney Festival – Explicó
cuando tuvo el valor suficiente – Escuche que estaban buscando un nuevo
escritor para la columna musical-
Summer le
dedico una gran sonrisa. Hacías meses que buscaba a alguien para ese puesto.
Sin embargo no encontraba a nadie que estuviera en condiciones de merecerlo.
Algunos postulantes tenían buena técnica, pero les faltaba el ingrediente
principal, pasión. La chica veía en la
morocha, quién la miraba con unos ojos
expectantes y retorcía sus manos nerviosamente, algo especial. Definitivamente
Scarlett tenía el estilo, con ese corte de peinado, la camisa abierta, los
jeans gastados, sus viejas Vans y una remera con el logo de Led Zeppelin. A
pesar de que Summer era la primera en decir que las apariencias engañan, tenía
un buen presentimiento.
-Con gusto
lo voy a leer- Contestó para la suerte de Scarlett, quién volvía a respirar con normalidad-
Apenas pueda lo leo y te hago llegar mi opinión.
Scarlett
asintió emocionada y luego de despedirse de la sorprendentemente amable Summer
dio media vuelta y comenzó a alejarse.
Antes de
dirigirse a su primera clase de la
mañana pasó por su casillero, dónde Elie la esperaba para saber cómo había resultado. Juntas se dirigieron a
Filosofía.
…
Summer cerró
la puerta de la editorial, ansiosa por leer el escrito de la nueva candidata.
Estaba por dirigirse hacia su computadora para darle los últimos retoques a una
nota para la próxima edición, cuando vio a una rubia de largos cabellos con
zapatos de plataforma rosas revolviendo sus preciadas fotos.
-¡Nicole!-
Exclamo- ¿qué estás haciendo?
Nicole era
la encargada de escribir la columna de belleza del periódico. Siendo sincera
nunca le había caído muy bien. Nicole era la clase de persona cuyo único hobby
consiste en entrometerse en la vida de los demás, lo cual para el periodismo
puede resultar un beneficio. Para el pesar de Summer, era muy buena en su
trabajo.
-Nada- Se
excusó mientras continuaba hurgueteando las imágenes- Sólo veía las fotos, ¿vas a ponerlas en el periódico?
-No lo sé-
Dudó Summer- No son muy buenas.
-¡Pero si
son fantásticas!- Comentó Nicole con fingida empatía - En especial la de la carpa del teatro.
Summer tomó
el montón de fotos y comenzó a revisarlas-En realidad son horribles, pero gracias por el comentario-
Nicole sonrió
y se alejó apresuradamente para continuar con su trabajo, en una de las
computadoras. Summer continuó revisando los fotogramas hasta detenerse en una. Era
la que prometía ser espectacular, la de los fuegos artificiales en el Sydney
Festival. Por enésima vez maldijo
internamente al chico de cabello castaño claro que se había interpuesto en el
medio de la captura.
Suspiro
frustrada y dejando las fotografías nuevamente en su lugar volvió a su tarea.
….
Abby
bostezó. Las clases de química del profesor Johnson eran muy aburridas, tanto
que de vez en cuando dormía una corta siesta. Eso era lo que estaba a punto de
hacer cuando sintió que algo vibraba en su pantalón. Era su celular. Lo tomó
controlando que el profesor no la estuviera viendo.
El mensaje
era una imagen donde se apreciaba una fotografía sobre una mesa. El remitente era
un número desconocido. En la imagen se podía ver, a grandes rasgos a ella
entrando en la carpa donde se representó a Otelo. Su corazón comenzó a latir
con fuerza.
¿Qué pasaría si esta foto sale en el periódico
escolar?
Era el
texto que acompañaba al archivo adjunto.
Su cabeza
comenzó a dar vueltas. Si alguien más veía la foto podía despedirse de su papel
en la obra escolar. Después de todo, cuando el director le había impuesto el
trabajo como castigo por fumar en los baños del colegio. Cosa que ella todavía
juraba no haber hecho. La consecuencia de no cumplir con dicha imposición sería
perder el permiso para participar en el club de drama.
‘Las
actividades extra curriculares son un privilegio, no un derecho’
Las
palabras del director resonaban en su mente. Su preocupación aumentó y las
nauseas estuvieron a punto de hacer que tirara su celular. Tenía que hacer algo
y pronto.
Comenzó a
pensar. Evidentemente la foto había sido sacada con una cámara profesional.
Abby sabía que la editora del periódico escolar tenía una. No era una teoría de
lo más verosímil, pero aún así, no se le ocurría otra cosa. ¿Qué perdía con
intentar? Tenía que entrar en la
editorial del periódico y robar esa foto antes de que sea demasiado tarde, pero
¿Cómo lo haría?
La imagen
de una pequeña chica de grandes ojos verdes cruzo por su mente y
automáticamente sonrió.
El timbre
sonó anunciando el fin de la clase de química. Salió del aula apresuradamente rumbo
al comedor. Tenía que encontrar a Cassie cuanto antes.
….
-¡Scarlett!-
Grito Summer desde el fondo del pasillo. Había buscado a la chica por toda la
escuela cuando la jornada finalizó y al fin la había encontrado.
La aludida
se giró algo extrañada por el llamado, pero en seguida se puso a templar al
notar que era Summer la que la llamaba. ¿Tan rápido había decidido decirle que
no la quería en su periódico?
Summer
llego al encuentro de Scarlett un tanto agitada y respirando entrecortadamente
por haber corrido la distancia que las separaba.
-Quería…
decirte - Tomó una gran bocanada de aire
y continuo- ¡Bienvenida al periódico!
-¿Qué?-
Inquirió Scarlett sin poder creerlo.
-Tu reseña
es espectacular – Afirmó con una sonrisa en su rostro- La mejor que he leído
sinceramente. No puedo dejarte escapar así que decime que aceptas ser parte del
periódico.
-¡Claro! Me
encantaría- Exclamo Scarlett feliz. En ese momento vino a su cabeza el recuerdo
de Calum y sus palabras. Sonrió.
-¿Vas a
poder?- Pregunto Summer trayéndola de regreso a la tierra.
-Perdón –
Se disculpó algo avergonzada por divagar en un momento tan importante- ¿Poder
qué?
Summer
repitió lo que había dicho, todavía algo entusiasmada-Cubrir el concierto de
esa banda que va a tocar en The Famous Spiegeltent-
-Si, por
supuesto-
-Genial –
Asintió la rubia- Necesito que me acompañes para terminar de acordar los
últimos detalles-
Summer
siguió hablando con Scarlett mientras amabas avanzaban por los pasillos de la
ahora solitaria escuela.
….
-¿Conseguiste
la llave?- Pregunto ansiosa Abby.
Cassie saco
la mano de su bolsillo y movió la llave de la editorial del periódico frente a
los ojos de la rubia. Abby no pudo contenerse y la abrazo fuertemente.
-Gracias,
gracias, gracias.
-Sí, sí, de
nada- Respondió Cassie conteniendo una sonrisa y escapándose del agarre de su
compañera- Me debes un favor muy grande. ¿Sabes lo que podría pasarme si la Sra.
Jackson se entera de esto?
-Quédate
tranquila, me hago completamente responsable - La tranquilizo Abby mientras
abría la puerta de la editorial y entraba a hurtadillas en la habitación.
-¿Qué estas
esperando? Apúrate antes de que alguien nos vea- Incitó a la castaña.
Cassie
comprobó que no había moros en la costa y finalmente entró maldiciendo por lo
bajo por su loca idea de ayudar a Abby. ¿En que estaba pensando? Si la Sra. Jackson,
la secretaria de la escuela, se enteraba de que le había pedido la llave
maestra del instituto para esto, en lugar de para ingresar en la biblioteca,
como le había prometido seria su fin. Esto podría afectar
gravemente su promedio.
A Abby no
le costó mucho trabajo encontrar las fotos. Estaban sobre una mesita color
marrón en uno de los costados de la habitación. Sonrió maliciosamente y se
dispuso a tomarlas.
-¿Exactamente
por qué quieres conseguir esa foto?- Pregunto Cassie haciendo que Abby se
sobresaltara.
-Porque-
Dijo- Si algún profesor la llega a ver seria el fin de mis días como actriz-
Luego de contestar volvió a su tarea. Tomó la pila de fotografías y las examino
una por una hasta hallar la que deseaba.
-Esto no te
estaría pasando si te hubieras quedado donde debías estar- La regañó Cassie.
Abby ya
había guardado la foto en el bolsillo trasero de su pantalón. Se giró para
contestarle pero se quedó petrificada mirando la puerta de la habitación.
Con el ceño
fruncido Summer Aworth y Scarlett Link las escudriñaban con la mirada.